BLACK JACK Y HELIX: COMBINACION GANADORA

La victoria en tiempo real del Black Jack en la 76ª Rolex Sydney Hobart esconde una historia de evolución basada en un arma secreta: la tecnología Helix.

Su patrón Mark Bradford, director general de North Sails Australia, explica las claves de la mejora en prestaciones que permitió al veterano RP100 imponerse en la mítica regata oceánica del Hemisferio Sur.

Black Jack es el antiguo Alfa Romeo, un Reichel & Pugh 100 botado originalmente en 2005. Desde que en 2009 cruzó en primera posición la línea de llegada de la Rolex Sydney Hobart, el potente supermaxi de 100 pies (30,5 metros) ha intentado sin éxito repetir la gesta bajo diferentes identidades. Su palmarés habla de más de 150 victorias en tiempo real en otras tantas regatas, pero la de 2009 era la única en la mítica prueba oceánica entre Sídney y Tasmania. Hasta este año. Peter Harbourg lo adquirió en 2017, y desde entonces había sumado un tercero, un segundo (2018) y un quinto (2019).

Oportunidad aprovechada

Cuando el pasado mes de abril el mástil del Black Jack se partió durante la regata Brisbane to Gladstone Yacht Race, se abrió una ventana para optimizar su rendimiento. El RP100 siempre había tenido problemas en ceñida contra el LawConnect de Christian Beck, un diseño Juan-K más ancho, por lo que su equipo de regatistas y los ingenieros de diseño North Sails se centraron en superar el punto débil del barco. La respuesta llegaba de mano de un nuevo paquete aerodinámico que aprovechaba la revolucionaria tecnología de reparto de cargas Helix.

El neozelandés Magnus Doole, diseñador de velas del equipo, explica que las instrucciones para el nuevo inventario del Black Jack exigían algo más que la simple sustitución de las velas y el aparejo. Aunque la mayoría de las velas de Black Jack eran relativamente nuevas debido a la cancelación de regatas en 2020, la filosofía de diseño de Helix había evolucionado significativamente y por tanto había que aprovechar esa nueva generación tecnológica. “Sabíamos que queríamos que todas nuestras velas se centraran en las capacidades de reparto de cargas de Helix”, explica Mark Bradford.

Tanto si se incorpora el Helix a una nueva construcción como si se actualiza el inventario, lo importante es el equilibrio entre fiabilidad, rendimiento y estabilidad de la vela. Magnus Doole y Jarrad Wallace, de Southern Spars, modelaron un nuevo paquete aerodinámico que optimizaba la combinación de velas Helix, un nuevo mástil y el aparejo Future Fibres. “El barco siempre ha tenido un talón de Aquiles”, reconoce Doole. “Es muy estrecho y ejerce poca resistencia, pero tiene un momento de adrizamiento más bajo que sus competidores. La ceñida con viento ha sido su perdición”.

En conjunto, la tripulación del Black Jack ha navegado en más de 200 Sydney-Hobarts, por lo que también se tuvo en cuenta su experiencia a bordo. “Gracias a Helix hemos conseguido un ahorro del 10% en el aparejo y la jarcia, al tiempo que hemos ganado mucho en rigidez”, explica Doole. “El reparto de cargas conlleva una menor compresión del mástil, por lo que convertimos parte de esa ganancia en un mástil más ligero y rígido».
“North Sails puede transmitir fácilmente este tipo de experiencia a barcos de todos los tamaños y formas, tanto si se tiene un nuevo mástil por encargo como si se va a utilizar un paquete de mástil y aparejo ya existente”, concluye Magnus Doole.

La primera gran prueba en alta mar para el nuevo paquete aerodinámico del Black Jack fue la 76ª Rolex Sydney Hobart, por lo que lograr la victoria en tiempo real ejerció de importante validación para el ambicioso proyecto. Además de añadir la estabilidad inherente a un barco estrecho al reducir el peso en popa, las nuevas velas Helix se adaptaron bien a la amplia gama de condiciones de navegación en ceñida a lo largo del recorrido de la regata.

En opinión de Bradford: “La ventaja clave de Helix es su rango de utilización. Contribuye directamente a reducir los cambios de velas y a optimizar sus formas en una gama mucho más amplia de condiciones. Se puede cambiar significativamente la forma de las velas cuando éstas se salen de su rango para volver a ponerlas en él. El beneficio es llevar menos velas, menos peso, menos cambios de velas, menor tiempo de inactividad y mayor rendimiento”.

El patrón del Black Jack recuerda cómo pudieron superar a rivales tan potentes como LawConnect o SHK Skallywag, los otros dos supermaxis de 100 pies de esta edición: “Aprovechando la filosofía de diseño de Helix y reduciendo el peso de nuestras estructuras conseguimos mantener a raya a un barco mucho más rápido en ceñida cuando había viento. Luego, cuando las condiciones se volvieron a nuestro favor, pudimos ampliar la ventaja. El Black Jack es ahora un barco mucho mejor en todos los aspectos, y esto ha venido sobre todo de los cambios que hemos hecho sobre la cubierta”.

Black Jack completó el recorrido de 628 millas náuticas entre Sídney y Hobart en un tiempo de 2 días, 12 horas, 37 minutos y 17 segundos. Las condiciones de esta edición impidieron mejorar el récord de 2017 del Comanche (1 día, 9 horas, 15 minutos y 24 segundos, también con velas North Sails), pero a cambio pusieron a prueba la capacidad de barcos y tripulaciones para adaptarse a un amplio abanico de condiciones que sirvieron a Black Jack para beneficiarse de la inmejorable versatilidad de la tecnología North Sails Helix.